La mentalidad que se necesita para triunfar en el fútbol y en los negocios

Ahora que el Mundial de Fútbol Rusia 2018 nos ha dejado muchas sorpresas, algunas decepciones y un extraordinario triunfo de la selección mexicana ante Alemania, esta es la mentalidad que se necesita para triunfar en el fútbol y en los negocios

La figura del futbolista pareciera que está fuera de la realidad, son famosos, millonarios, exitosos y les pagan por hacer algo que aman. Haciendo un paralelismo de esto, es algo que se puede comparar con los emprendedores, aunque sin tanta fama ni dinero para algunos, realizan la labor que más disfrutan en la vida.

Tanto en el terreno de juego como en los negocios, la mayor parte del tiempo se trata de estar en constante aprendizaje, esforzarse, trabajar mucho y mejorar. En ambos sitios existen más fracasos que triunfos espectaculares, pero en estas dos actividades, lo que hace que una persona destaque es la mentalidad que posee.

Mucho se ha criticado a la selección mexicana de Rusia 2018 por declarar públicamente cada que tiene oportunidad los jugadores de hacerlo, que ellos confían en el equipo, en su líder y que están preparados para lograr cosas grandes y construir una historia positiva.

Estas críticas van aumentar luego de la estrepitosa derrota contra Suecia en el último partido de la fase de grupos y aunque se consiguió el pase a cuartos de final, la percepción que dejó esto es mala en el aficionado.

Pero tal como lo señaló en su momento el boxeador Mohamed Alí, “imposible es sólo una palabra que utilizan los que encuentran más fácil quejarse del mundo que explorar el poder que tienen para cambiarlo. Nada es imposible”.

Lo mismo pasa con el emprendedor, que se imagina cosas, sueña con materializar sus ideas y trabaja para ello, a pesar de que en su entorno solo haya críticas  que denigran su esfuerzo, sin valorar que día a día está en evolución para ser mejor y alcanzar lo “imposible”.

Pero como todo en la vida, la colaboración mutua, la disposición para ayudar y comprometerse con el compañero y solucionar los problemas de manera conjunta, son los elementos de la fórmula más eficaz para alcanzar el éxito.

Tal como lo señala un texto de Entrepreneur, “las victorias de la Selección Mexicana en el mundial de Rusia no solo son productos de la calidad técnica de cada jugador, sino del trabajo en conjunto armónico que es derivado de un buen ambiente en el vestidor”.

Traslado al mundo empresarial, esto tiene el mismo significado cuando la estructura organizacional es sólida, responde a los liderazgos establecidos, tiene una cultura de respeto y valora a sus miembros y sobre todo, que fomenta un entorno favorable para las personas.

Pero hay otro factor que levanta el ánimo y fortalece el autoestima tanto del futbolista como de cualquier profesional, independientemente del área donde se desempeñe: que es competir siempre contra los mejores.

“Solo los buenos quieren mejorar, por eso son buenos”, dijo alguna vez el golfista británico Nick Faldo y aunque la presión siempre es mayor y las responsabilidades también, esforzarse por demostrar ante los mejores las capacidades y habilidades de cada uno es romper barreras mentales, físicas y emocionales.

Esto lleva al liderazgo. “Nadie puede obligar a nadie a comprometerse, te lo tienes que ganar transformándote en un líder digno de confianza que lo merezca”, dice Imanol Ibarrondo, creador del Instituto de Coaching Deportivo y miembro del cuerpo técnico de la selección nacional mexicana en Rusia 2018.